Los pasados 16 ,17 y 18 de Octubre se ha celebrado el 5º congresos nacional sobre especies exóticas invasoras. En él, ha quedado en evidencia que método de erradicación de especies exóticas no es eficaz y vuelve a dar la razón a lo que el colectivo de pescadores llevan denunciando desde hace mucho tiempo: es imposible la erradicación de los peces que habitan incluso en un pequeño lago como el de Banyoles (Gerona).
Los datos que se arrojan son muy claros:
después de malgastar de dinero público de las arcas del Estado co-financiado con dinero Europeo (una suma de superior al millón de euros) y más de 4 años de trabajo no se ha conseguido erradicar ni la carpa ni el Black Bass en el lago de Banyoles. Este pequeño lago apenas tiene un tamaño de 112 ha (es 45 veces más pequeño que el embalse de Orellana). De hecho, actualmente la población de algunas de las “invasoras” del lago está en aumento tal y como lo recoge en el Libro de Resumen del congreso. Pero no solo queda aquí la cosa, debido a la reducción de la población del Black Bass, se ha disparado por 32 la población de cangrejo rojo Americano.
Una autentica vergüenza que deja claro y reafirma las opiniones que defendían los pescadores sobre el manejo de especies exóticas invasoras.
Desde ANATUR – Acción Natural Ibérica solicitamos tanto a los colectivos conservacionistas como a la Administración y el Gobierno la modificación de la ley 42/2007 de Patrimonio y Biodiversidad, y la reconsideración del Tribunal Superior de Justicia para restaurar la normalidad para la pesca deportiva en España debido a los dato que arroja entre otros los mismos peritos que participaron en la sentencia 637/2016 del TS.
También cabe indicar que se sigue utilizando rotenona tal y como se indica en el libro de resumen del congreso, en este caso ha sido en un arroyo de la cuenca del Guadiana, en Extremadura. Dicho producto, catalogado como toxina ambiental, deja al agua sin oxigeno el agua. Se ha comprobado su relación con la enfermedad del parkinson