Los cebos de plástico entre mis montajes no fue tarea sencilla ya que siempre me preguntaba: ¿cómo va a comer una carpa, tan grande como inteligente, un trozo de plástico? Pero después de emplear con éxito estas imitaciones durante casi una década voy a desvelar todos sus secretos!
La pesca durante los meses cálidos se complica mucho debido a la actividad del cangrejo, éste hacía desaparecer mis cebos naturales muy rápidamente y cuando incluía la noche en las sesiones de pesca debía levantarme cada 2-3 horas para pinchar nuevos cebos en mis hair pelados. Para solucionar este problema comencé poniendo pequeñas bolas de madera sin tratar, destinadas a la fabricación de pomos para cajones y que compraba en carpinterías. Las taladraba con una broca fina y las sumergía en aromas. Para restarles flotabilidad rellenaba algunos de los agujeros con hilo de plomo y así conseguía tener cebos totalmente equilibrados. Los cangrejos roían las bolas de madera pero pescaban durante toda la noche. En ocasiones obtenía picadas aunque casi siempre las perdía ya que el bajo estaba muy dañado por la persistente acción de los crustáceos rojos.
Conocía la existencia de las imitaciones de plástico pero no me decidía a usarlas, siempre pensé que las carpas descubrirían el engaño y detectarían el sabor a caucho. Fue en un año de los que el cangrejo experimenta una explosión demográfica brutal cuando comprobé con mis ojos que en el lugar donde estaba mi “pomo de madera” había una montaña de cangrejos atacando y destrozando el montaje en menos de 20minutos. Desesperado, opté por darle una oportunidad a los cebos de plástico. Los primeros en entrar en mi caja de aparejos fueron boilies de 18mm de Enterprise Tackle. No desprendían ningún olor y los remojé en diferentes aromas ligeros. En mis primeras experiencias con estas bolas obtuve picadas y me sorprendí gratamente. Observé que prácticamente no se deterioraban con el paso de las horas bajo el agua, aunque los cangrejos las embestían de igual manera que las de madera. Desde ese momento comencé la búsqueda de dips que atrajeran a las carpas y a su vez fueran poco apetecibles para los “americanos”. Descubrí que las esencias cárnicas, saladas y sobre todo las elaboradas con bases oleicas, eran las más perseguidas por los cangrejos, sin embargo, dulces o con extractos de frutas de dynamitebaits eran bastante más respetadas: Banana Nut Crunch, Chocolate Malt & Tiger Nut, Peach & Mango with Maplecream, Monster Tiger Nut … Noté que tras mantener los boilies de Enterprise sumergidos durante varios días, éstos desprendían un olor muy intenso y los problemas resurgían, entonces decidí rebajar la concentración usando un 50 y hasta un 75% de vodka en todos mis remojos, conseguí que la base principal del dip persistiera pero más sutilmente.
Tras un tiempo usando los eternal boilies y superando con creces todas las expectativas esperadas, quise probar suerte con otros plásticos como las imitaciones de maíz, chufas y pellets. Estos últimos venía con un leve aroma a comida marina y los respecté mientras duró, al igual que el maíz de tutti fruti.
Cambiando de tercio, los señuelos artificiales luminiscentes llevan usándose desde hace varias décadas en la captura de depredadores acuáticos de agua dulce y salada, pero nadie cayó en la cuenta de probarlos con nuestras amigas. Fue la misma empresa la que inició sus pinitos con los cebos luminosos. La carpa percibe los objetos según la intensidad que desprenden los colores primarios: rojo, verde y azul, al igual que los humanos pero además, es sensible a la luz ultravioleta y por si fuera poco, estudios recientes han demostrado que pueden ver en el espectro de los infrarrojos, es decir, en la total oscuridad. Paralelamente, sabemos que las carpas son muy curiosas y suelen tomar los cebos que se destacan del fondo llamando su atención. Enterprise Tackle y Korda aplicó estos conocimientos a sus productos y así podemos encontrar tanto cebos fluorescentes como luminiscentes. Los primeros son recomendados para aguas limpias y poco profundas, los segundos para aguas turbias, profundas o carentes de luz. Yo he conseguido buenos resultados con ambos, en especial con los fluorescentes.
Viendo que la carpa aceptaba con total confianza estos cebos de plástico empecé a utilizarlos no sólo en verano sino durante todo el año. Mi montaje favorito es la combinación de una de estas imitaciones con otros cebos naturales como por ejemplo una ristra de 2 granos de maíz dulce y en el extremo uno de plástico o un snowman con el mismo formato. Estoy seguro que la carpa puede sentir los campos electromagnéticos que rodean los cebos y en el caso del caucho emitirá unas señales diferentes a los cebos naturales. Estas diferencias podrían alertar a las carpas, por esta razón creo que la combinación plástico – natural es la mejor. Por otro lado, desde mi punto de vista, poner en el hair un cebo megaoloroso no es lo más correcto para capturar el pez de nuestra vida, seguro que recelará y no lo tomará por mucho que le llame la atención. Entonces opté por poner plásticos sin remojar de modo que el cebo natural pusiera el aroma y la imitación proporcionara la atracción visual y la flotabilidad. Además, si el cangrejo estaba activo, se comería la parte natural pero siempre quedaría el plástico y al contrario de lo que opina mucha gente, nuestro engaño seguiría pescando sin problemas. Al realizar los montajes bajo este esquema conseguimos un cebo neutral que se levantará del fondo a la más mínima absorción, tal y como lo haría un cebo libre, anulando el efecto ancha que ejerce el anzuelo, además atraerá visualmente a la carpa siempre que el color destaque del fondo, por poner un ejemplo, un boilie verde no destaca en un fondo con algas pero por el contrario uno negro o blanco resaltará de entre la vegetación, de igual forma, durante la noche, se distinguirá mucho más un cebo luminiscente que uno convencional.
He dejado a un lado una de mis imitaciones favoritas para dedicarle unas líneas exclusivas, creo que es la que más peces me ha dado, se trata de la chufa de plástico. En verdad es una imitación bastante mala 🙂 y no ejerce ninguno tipo de atracción óptica pero acompañada de una chufa natural del tamaño convenido para conseguir la neutralidad es un cebo infernal en cualquier época del año!
También tenemos disponibles una gama muy amplia de imitaciones como de pan, fiambre, galletas para perros, lombrices rojas, asticot, cereales, gambas, mejillones, boilies de diversos tipos y tamaños, frutos secos, la mencionada chufa, el mítico maíz y el cañamón, por nombrar algunos. Se puede decir que esta gama de cebos cubre cualquier situación de pesca.
Respecto a los montajes, suelo usar dos materiales dependiendo, cómo no, de la actividad del cangrejo. Si se encuentra muy activo, confecciono un bajo estándar de flurocarbon. Este material no absorbe ningún tipo de olor y por lo tanto, no son atacados por los “rojos” hasta el punto de la rotura. Podemos hacer un chod rig o un bolt rig convencional.
Si por el contrario, el cangrejo se mueve poco, la libertad es máxima y elaboraremos los bajos que creamos convenientes en cada momento. Yo no podría generalizar porque mi montaje depende 100% del escenario y de mi pesca en esa época, pero lo que si puedo asegurar es que me encantan los materiales dúctiles como el supernatural de korda y siempre que me lo permiten lo pongo en mis bajos. Este trenzado es superflexible y muy suave, proporciona al cebo una movilidad extra que lo hace más natural, y para que pase totalmente desapercibido está disponible en los colores más comunes: verde alga y marrón grava.
Para finalizar, hablemos de un punto débil que explotan los cangrejos. Como ya he comentado, no se comen los plásticos de Korda ni Enterprise, pero si logran quitar el tope, sacarán los cebos del hair con mucha facilidad. Multitud de horas a pie de orilla me hicieron darle vueltas a la cabeza buscando el tope ideal, el tope anticangrejo y aunque encontré varias soluciones muy válidas, la mejor de todas es el tope extenda de Korda. Uso el tamaño pequeño para actividad del cangrejo baja o media y los medianos para actividad máxima. Su diseño en forma de flecha hace que penetre con facilidad en el cebo pero sin embargo es difícil extraerlo, los “americanos” lo tienen muy complicado. Pero esto no es todo, la parte final del hair, inclusive el vulnerable nudo, permanece en el interior del cebo por lo que tampoco puede ser manipulada.